miércoles, 30 de enero de 2013

56/ Naturaleza artificial

Rousseau cortocircuitó, anteayer, mi duermevela. Con luenga cita. Brota de su Discurso sobre el origen y fundamento de la desigualdad entre los hombres. No la transliteraré. Viene a enunciar que la Naturaleza del hombre peca, en parte, de artificiosa. Inquirí a mi álter ego: ¿Qué hay de natural en mí? ¿Qué, de artificial? Recusar implicaría aprehender nuestro ser más hondo. Ignoro si ello engloba allegarnos escrupulosamente al Otro. Rousseau departe de un estado de Naturaleza. Indago: ¿Es que cada vástago de vecino comparte pintiparada esencia con su prójimo? Y, ¿es que resulta mancomún el tronco de que brotaría la 1ª persona del plural? De lo natural se desgaja, a veces, lo salvaje. ¿Y de lo artificial? Infiero: El hombre sintético ambula hacia el androide idiotizado. Se solaza con video-con-solas, emerge de nuestras con-ciencias. Voceo: ¿Sobre qué riscos anhelamos despeñarnos? ¿No habría, cavilo ahora, que evolucionar? Elucúbrese.                  

viernes, 25 de enero de 2013

55/ Rosagralhambra

Mi infancia es memoria de una plazoleta granadina. De ordinario enuncio que broté en Gralhambra. Tan maravilloso topónimo se me antoja connatural. Pere Gimferrer alude a Granada y a la Alhambra en su Rapsodia. Un nominativo exhuma: Moraima. Al descifrarlo, evoco a Boabdil. Entrambos se bienquisieron en la algebraica ciudadela tal Rosalinda y yo. Y ambularon por entre sus jardines tal Rosalinda y yo. Y se acodaron en la baranda de la Sierra Nevada tal Rosalinda y yo. Regreso a Rosalhambra con visos de morriña. Anhelo imbuirme de ella y de su inocencia andalusí: Amor primigenio, sueño inmaduro y lírico de mi desvelo. Ulteriormente retornaría Sevilla y arribaría Huelva. Permítaseme que priorice plazoleta y niña y ciudadela sobre sendas metrópolis de mi corazón. Rosagralhambra rezuma inmortalidad.

miércoles, 23 de enero de 2013

54/ Ficción real

La biblioteca de Babel borgiana deviene arquetipo universal. Sus muros abrazarían todos los libros verosímiles. Regularmente acudo a ella. Se ubica a escasos dos metros de mi silla de laboro. Hoy he vuelto a incursionarme por Gárgoris y Habidis. Una de sus páginas me ha impelido a evocar La casa de Aizgorri, de Pío Baroja. Ha acaecido por mor de una presa. El numinoso mamotreto engalana tan trillado motivo con narraciones míticas y bíblicas. Debajo subyace el mito del Arca de Noé. Hay un héroe, Hu, que resuella junto a un lago con dique. También su esposa. Y un castor que se consagra a horadar el represor pluvial. A la escorrentía superviven héroe y consorte y una pareja de cada especie animal. Burlan a la Parca a bordo de una barca. Hu es lisonjeado. Valle Inclán reveló que la novela se le figuraba inmersa en neblinas: Por sus renglones transitarían vidas de ensueño. ¿Ergo: De mito? Concurren el castor y el ídolo (Mariano) y su potencial consorte (Águeda). Y la retenedora pared. Cabría amalgamar los conceptos “niebla”, “vida” y “ensueño”. Inquiero: ¿Y los libros con la vida? ¿Y la vida con los mitos? ¿Y la ficción con la realidad? Somos mamelucos, ay, de una fábula iterada.

viernes, 18 de enero de 2013

53/ Desperación

Nadie computa nada más allá del amor. La metafísica hegeliana se ningunea. El ingenio es inadvertido. Cruzar el rubicón se torna utopía. Facilismo y celeridad aceitan el engranaje de la poesía post-moderna. Propendo a creer que nos aprovecharía eludir la 1ª y 2ª persona del singular. A pesar de Parra y su Antipoesía. Una que otra cumbre del espíritu poético habrá sin conquistar. Y con vistas a la vega. No a una descalabradura. Inquiero: ¿A qué contemporáneo habré de acudir que me satisfaga literariamente? ¿A qué coetáneo? Vaya por delante que mi primer vagido lo exhalé en Síbari.
   

domingo, 13 de enero de 2013

52/ Originalidad ingeniada

Gonzalo Torrente Ballester prologó Gárgoris y Habidis. La invención ajena devendría, para él, responsable de nuestra ramplonería. Buda atestiguó que nada es lo que aparenta ser: Gusto, tacto, vista y olfato inocularían la Verdad. Unos pocos fabulan siniestramente el Sistema en que malvivimos. Su postulado: Aherrojar al prójimo. Apague, enuncio, y escurrámonos. La primitiva piel de toro es saldada al preferible postor.

martes, 8 de enero de 2013

51/ Panegírico

A Mercedes de Velilla


Recelabas de la omisión. A los poetas sevillanos ha revenido mi pecho: Nunca te postergaré. Tu obra a nadie agravia. Rezuma perfección. Y, amén de dolerse entre hiperbatones, pureza. Trajiste a la luz cuatro crea-turas. Dos perviven en mi biblioteca. El remanente subsistirá en una que otra abacería. No engrosa el nomenclátor de las tienduchas de nuevo. Otros desgarros de ínfima escisión ocupan su puesto. La actualidad impele. Quienes medís y rimáis sois condenados al ostracismo. El buche de la República de las Letras Post-modernas os regurgita: Jame e indigesten esotros manjares. Yo te trincharé y trituraré y deglutiré para mi sustento. Yo departiré de ti y de tu lira donde toque. Yo no te enterraré. Yo, Mercedes, exhumaré tus restos poéticos sin reconcomio.     

jueves, 3 de enero de 2013

50/ Alta literatura

Gárgoris y Habidis satisfaría a lectores intolerantes. Una plumilla quevedesca lo rubrica: Fernando Sánchez Dragó. Inquiero: ¿Osaré incursionarme en sus mieles hasta el cabo? ¿Y si me sumerjo? Novecientas páginas de alta literatura ahogan al más engreído. Le extasían. Le obnubilan. Le (para el caso es símil) despeñan. Riscos aparte.