Sé y lamento la heterogeneidad de la obra del bardo Rafael. Entre el clavel y la espada atesora un doble signo: Amor y pacto. Adolece de ambigüedad y de pluralidad significativa. Bellezas plásticas jalonan estas composiciones. Y la canción popular. Y la Guerra (in)Civil. Y el exilio… Hay un trasfondo humanitario ajustado a contenido: se deja leer a ratos; a ratos deviene sublime.
Sé y lamento la homogeneidad de la obra inverosímil del bardo Rafael. Marinero en tierra enarboló luminarias que encandilaron mis ojos…
Concluyo: comparar obras de un mismo autor es equivocado. Máxime, cuando uno de los términos de la comparación deviene <<obra maestra>>. Injusto, ello, a todas luces. A todas luces innecesario. Lo sabe el autor; el lector, lo ignora. El lector, en su inopia deliberada, no para mientes en en ese ítem ético. Es ésta la fatalidad del bardo Rafael.
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